El 27 de febrero de 2010 hubo un terremoto en Chile, que provocó un devastador tsunami. Fue uno de los más monumentales seísmos registrados en la historia de la humanidad.
Esta tragedia desoló un fragmento importante del país.Una de las zonas más convulsionadas fue la región del Maule. Familias y amistades gozaban de los últimos días de verano en la isla Orrego, ubicada a pocos metros de la ciudad de Constitución. Ninguna de ellas esperaba que sus vidas fueran a cambiar tan radicalmente. Once años después, los sobrevivientes han abierto sus corazones.
Son diez testimonios que describen historias de amor profundo, recuerdos entrañables, generosidad incondicional, ilusión, esperanza y resiliencia.